21 de enero de 2009

CREER O NO CREER

YO NO CREO EN ADAN Y EVA


Se han puesto de actualidad las campañas sobre lo que los anunciantes creen acerca de la existencia de Dios. Un cartel nos podrá anunciar sobre "la familia cristiana", y se le cruzará un autobús con un llamativo anuncio sobre que "Dios puede que no exista", y le animaran a vivir sin complicaciones. Otros, generalmente interesados en el mantenimiento de sus estructuras de poder, y de sus medios de supervivencia, le diran, así de simple, "Dios si existe".

Bueno, pues yo voy a entrar en el tema por otro ala: yo no creo en Adan y Eva. Pero, lean, voy a dar mis razones, las razones incontestables de la ciencia.

De protozoos y bacterias, más o menos, vienen todos los seres vivos y, para lo que voy a decir, nada importa que el "ojo que todo lo ve" haya visto de donde salieron los protozoos y las bacterias.

El caso es que las células eucarióticas fueron colonizadas por unas bacterias. Aquellas bacterias, las mitocondrias, tomaron a su cargo proporcionar la energía a las células. y se quedaron allí hasta ahora

El mapa genético de las células está en el ADN nuclear, pero las mitocondrias tienen su propio ADN mitocondrial. ¿Por qué todos esto que parece tan complicado nos proporciona la base para no creer en Adan y Eva... y para no creer en otras cosas?

Cuando un acto de procreación tiene lugar dos células se unen y, de esa unión, resultará una ueva vida. La nueva célula portará los genes del ADN nuclear al cincuenta por ciento de las dos células primitivas, procedentes del varón y de la hembra.

¿Pero que ocurre con el ADN mitocondrial? Ocurre lo decisivo, las mitocondrias de la célula procedente de la mujer pasan a la nueva derivada de la unión, y las del hombre se pierden. El resultado, del que ya saben algo por las narraciones de los medios, es que la única identificación garantizada del nuevo ser con la progenitora es por el ADN mitocondrial.

Entonces, muy claro según la ciencia, al estar comprobado que el ADN mitocondrial de todos los seres humanos NO es exactamente igual, es obvio que todos no pueden descender de la misma mujer, de Eva. Luego, así, queda demostrado que la "primera mujer" NO es la madre de toda la humanidad.

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